Townshell, Eva Dayne | ID.

• Nombre Completo: Eva Dayne Townshell Moreau.
  
• Apodos: Eva, la pecadora original.
  
• Edad: 19 años.
  
• Lugar y Fecha de Nacimiento: 19 de Abril de 1994, París. Francia.
  
• Orientación Sexual: Heterosexual.
  
• Enfermedad: Esquizofrenia Paranoide - Es aquella enfermedad que se caracteriza por los siguientes síntomas: predominio de ideas delirantes y alucinaciones, lesiones graves a uno mismo y a los demás, alteraciones de la personalidad.
  

Rara. Desde que tiene uso de razón, Eva siempre ha sido esa niña rara a la que todo el mundo mira con el mismo recelo que curiosidad. Parca el palabras, demasiado tímida y sonrojada como para acercarse por gusto a los demás. Desconfiada por naturaleza, como si todo y todos fueran una bomba de relojería a punto de estallar. Se podría decir, sin temor a estar errados, que la morena es un ser solitario, al menos siempre que no tengamos en cuenta las compañías de su cabeza. Es curiosa. Quizás no como la mayoría de la gente, no acribilla a preguntas o se molesta en hacer averiguaciones; pero observa. Le fascina observar a al gente, aunque acabe sintiéndose triste y sola por no tener las mismas capacidades que el resto.
Si quieres saber si hay algo más, tras la apariencia de muñeca rota y vacía, vas a ser tú quien tenga que acercarse, porque a la morena no es que le interese mucha gente.

La amistad es un concepto muy raro para ella. Pero si consigues acercarte, será sencilla y sincera. Quizás hasta te asuste su manera tan clara de decir las cosas. Es experta en guardar secretos, al fin y al cabo se pasó varios años haciéndolo. No busques en ella consejos, porque hablarán otras voces y puede que acabe todo en una sublime catástrofe.
La enemistad es algo que se le da mejor, o que al menos, tiene más claro. Puede enfadarse por las cosas más estúpidas que puedas imaginar, pero si es importante para ella, te hará saber que le has fallado. Puede perdonar una vez, a la segunda, pasarás a ser enemigo y no dudará en saltarse las normas que haga falta si considera que tiene que hacer justicia.

De apariencia frágil y asustadiza, Eva es una contradicción en sí misma. Pues en su cabeza, ha luchado con monstruos por los que tú mojarías la cama. A veces es de carácter fuerte, sobre todo posesiva y quizás con un punto caprichoso. A veces se impone soprendentemente y maneja las situaciones. En otras ocasiones, se desdibuja como si no fuera más que un globo perdiéndose en la lejanía.
Es celosa. Pese a que no se considera ni seductora ni especialmente bonita, tiene sueños y deseos. Cree que quizás si alguien la cuida, desaparecerán los delirios, porque no serán necesarios. No es especialmente coqueta o lanzada en estos temas, retraída, como en casi todo, pero sabe lo que quiere y cuando lo encuentre solo tendrá que averiguar la manera de ir a por ello.

GUSTOS:
» La fotografía y la escritura. Trata de documentarlo todo lo mejor que puede.
» El frío, particularmente la nieve y el hielo.
» París.
» El café caliente con leche y azúcar.
» La música y el cine antiguo.
» Sus diarios.

ODIOS:
» Los animales. En sus alucinaciones suelen perseguirla y atacarla, con lo que le paralizan tanto si son reales como si no.
» Los abusos, y con ello la gente que no sabe defenderse por sí misma.
» La medicación.
» Las batas blancas que implican médicos, pruebas y experimentos.
» El sol y los días largos de verano.

DEBILIDADES:
» Su propia enfermedad.
» Le aterra perder sus diarios. Allí anota todo lo que ocurre, tanto real como producto de su enfermedad. No quiere que nadie sepa el contenido de estos.
» El electrochoque y pruebas médicas de ese tipo.
» No distinguir las alucinaciones de la vida real.
» Es algo claustrofóbica.

MANÍAS:
» Duerme con la ventana abierta, no importa el clima que haga. Le ayuda a sentirse menos encerrada.
» Ladea la cabeza y fuerza la vista casi siempre. Es como si eso le sirviera para distinguir lo real de lo que no.
» Siempre se despeina y alborota el pelo.

Alta, y delgada, tiene la piel pálida lo que le d un aspecto enfermizo bastante habitual en este lugar. Tiene el rostro angulado y es habitual verla con ojeras por sus malos hábitos de sueño.
Tiene un tatuaje es el símbolo del infinito en la nuca. Lo más curioso de la historia es que no recuerda con exactitud cuando se lo hizo.
El único otro rasgo llamativo de su cuerpo es que tiene varias cicatrices a lo largo de los brazos. Son debidas a sus brotes, algunas veces se ha autolesionado de manera inconsciente por sus delirios.

Eva nació en primavera, hija de un matrimonio mixto de un Inglés y una señorita francesa. Pasó toda su infancia residiendo en París. Durante su infancia, siempre fue una niña retraída, pero aún así muy creativa. Vivía más en su mundo imaginario que en el real, pero nada que aparentemente preocupara demasiado a la familia.

En su época escolar, nunca fue demasiado popular, era una niña frágil y quebradiza, que parecía tenerle miedo y desconfianza a todos. Cuando la muchacha cumplió 12 años, la tierra patria de su padre los reclamó. Un trabajo le salió en Irlanda y toda la familia tuvo que trasladarse. Los padres de la morena, pensaron que el cambio de aires le vendría bien a la niña, donde podría empezar de nuevo y quizás esta vez encajar. Eva sentía la presión de sus padres, París era de las pocas cosas que no la aterraban del mundo real. Y entonces, todo se descontroló y los monstruos se hicieron del todo reales.

No es capaz de recordar cuando tuvo el primer episodio ya que en su cabeza siempre hubo más movimiento que en la realidad, pero sus 13 años fueron convulsos. Llenos de alucinaciones aterradoras que escondía bajo un comportamiento de adolescente rebelde. ¿Cómo huir de tus propios fantasmas?. Los Townshell pensaron que era la forma que tenía su pequeña de rebelarse ante aquel cambio tan brusco en su vida y decidieron no intervenir más allá de los castigos típicos a una adolescente.
Para Eva las barreras de lo real y de su aterrador mundo se borraron. Las drogas, el alcohol, el abuso de las fiestas y la adrenalina de los problemas solo ayudaron al principio. Los monstruos seguían allí, le indicaban que todos acabarían con ella, no debía fiarse de nadie más. Ellos siempre habían estado allí, ¿por qué iban a mentirle?.
Pero en los momentos de lucidez, la muchacha veía la desolación de sus padres. Confusa y perdida, Eva se alzó entre sus propias alucinaciones para luchar contra ellas. En su mente, usa todas las armas del mundo contra aquellas voces que le dicen qué debe hacer o aquellos animales rabiosos que la persiguen. En su mente, ella lucha y es la heroína de aquel mundo fantasioso que acabó por rebelarse contra ella.

Después de casi dos años de caos y delitos a causa de sus delirios, la joven acabó en el calabozo dos días. Su comportamiento errático y antinatural fue el que puso sobreaviso a todo el mundo. Al final, pese al terrible sentimiento de culpa, los Townshell pudieron descansar tranquilos. Esquizofrenia, bienvenida a casa.
Con 16 años, firmaron los papeles de ingreso de la chica en el centro. No es precisamente la paciente ideal, ya que al haber encontrado su propia forma de hacer frente a la enfermedad, todos los médicos, pruebas y fármacos le parecen otro delirio que no está dispuesta a asumir. Su único deseo para curarse y salir de allí consiste en los vagos recuerdos que tiene de su hermano pequeño, el único ser que le trasmitía calma desde su diagnóstico.

» George H. Townshell: Padre, 43 años. Es un hombre muy centrado en su trabajo como abogado de oficio. Desde hace años la relación con Eva es casi nula, porque el buen hombre no tiene ni la menor idea de como tratar a la muchacha. Para la morena todo se estropeó cuando la internaron, alejándola de su hermanito.
» Anne-Marie C. Moreau-Townshell: Madre, 40 años. Ha trabajado como profesora la mayor parte de su vida, fue la primera que se dio cuenta de que algo no funcionaba bien con su hija. La visita regularmente, pero para Eva todo es demasiado irreal y frío, nada maternal.
» Samuel E. Townshell: Hermano menor, 12 años. Desde que nació para Eva fue como un único lugar seguro, la única persona de la que no sentía que tenía que huir. Se llevaban muy bien y es lo que más echa de menos en el mundo, su única razón para querer mejorar.

» Los diarios que ha estado escribiendo desde los 13 años, desde esos hasta el que lleva actualmente.
» Tiene una cámara fotográfica, la mayoría de las veces no tiene batería y la memoria está llena. Pero llevarla le hace sentir más segura.
» Un camafeo con la foto de su hermano pequeño.

» Trata de engañar con la medicación, porque no le gusta tomarla. Ha tenido varios problemas por ello, pero lo sigue haciendo.
» Tiene antecedentes delictivos por peleas y robos que no recuerda, porque forman parte de sus alucinaciones. Llegó a pasar dos noches en el calabozo de la comisaría local hace un par de años.
» Durante su adolescencia, su enfermedad se descontroló muchísimo y fue cuando decidieron buscar donde internarla. No sabe si es virgen o no, ya que en sus alucinaciones pasaron cosas pero como abusó mucho de las fiestas por aquella época, no es capaz de diferenciar lo real de lo irreal.
» Guarda diarios desde los 15 años. Matará literalmente a quien los toque.